7 formas de combatir el calor por la noche

Ago 19, 2020 | CONSEJOS, DESCANSO

¿Eres de esas personas que suele pasar calor por las noches? Aunque sea específicamente en las vacaciones de verano, seguro que alguna vez te ha ocurrido que no puedes dejar de dar vueltas tratando de evitar el calor que te invade.

También es posible que este calor que se apodera de tu descanso sea responsabilidad del colchón: si tu colchón no transpira lo suficiente, tenderá a almacenar más calor y será más complicado mantener la frescura. En cualquier caso, ya sea debido al calor asfixiante que caracteriza al verano como a un colchón o ropa de cama poco transpirables, es posible combatir el calor por la noche.

 7 formas de combatir el calor por la noche

Hay ciertas personas a las que descansar bien por las noches en verano les resulta todo un desafío. Por eso a continuación te presentamos algunos trucos que podrían ser de ayuda para combatir el calor por la noche:

1. Cenar ligero

Una de las causas que pueden llevar a pasar calor por las noches es cenar pesado. Platos como estofados, sopa u otras comidas calientes pueden ser complicados de digerir por las noches, lo que puede provocarnos una mayor sensación de calor.

Así pues, lo mejor que podemos hacer es cenar comidas ligeras, que no requieran una digestión excesiva. Ejemplos de ello pueden ser ensaladas, yogur, gazpacho o fruta fresca.

Por otro lado, por extraño que pueda parecer, las comidas picantes también están indicadas para ingerir en esas noches de verano en las que el calor nos agobia. La razón de ello es que este tipo de comidas estimulan la sudoración, lo que hace que nuestro cuerpo libere el calor y se refresque antes de irnos a dormir.

2. Una ducha de agua tibia antes de acostarse

Aunque pueda parecer que lo mejor para irse a dormir es una ducha fría, lo cierto es que puede crear el efecto contrario si lo que buscamos es librarnos del calor para dormir. En sí, el agua fría podría reactivar nuestro organismo así como aumentar el gasto energético, que podría aumentar esa sensación de calor.

3. Ropa de cama transpirable

Otra de las razones que pueden llevarnos a tener mucho calor por la noche es no disponer de ropa de cama lo suficientemente transpirable. En este caso, lo mejor es optar por sábanas 100% algodón, que disponen de la transpiración suficiente como para que el calor no se quede bloqueado entre nuestro cuerpo y las sábanas.

4. Un colchón transpirable

Así como la ropa de cama puede ser la responsable de nuestro calor por la noche, el colchón no lo es menos. Los colchones transpirables son aquellos que permiten el paso de flujo del aire para así evitar malos olores y humedades que deterioren el producto.

Tanto en el caso de la ropa de cama como en el de los colchones, la transpirabilidad debería ser una propiedad clave en el colchón para estas personas calurosas, especialmente en esas épocas en las que las temperaturas son elevadas. Para que sean lo suficientemente transpirables, los colchones no necesitan ser de un material específico: hoy en día, la tecnología de los colchones ha avanzado hasta el punto de poder ofrecernos colchones transpirables fabricados con cualquier tipo de material.

5. Un pijama ligero

A veces ocurre que el responsable de que nuestro cuerpo acumule calor durante la noche es el pijama. Y es que si lo que queremos es evitar el calor a toda costa cuando nos acostemos, hemos de asegurarnos de que el pijama que utilicemos sea lo suficientemente fresco.

Hay quien opta por dormir desnudo, esto también puede ser una opción si no nos incomoda. En cualquier caso, si eres de esas personas que acostumbra a dormir con ropa, has de asegurarte de que el pijama sea ligero.

6. Evitar hacer ejercicio justo antes de dormir

Hacer deporte pocas horas antes de irnos a dormir puede ser contraproducente si lo que buscamos es acostarnos fresquitos. Por eso, si acostumbras a hacer ejercicio durante las últimas horas del día, lo mejor será que evites hacerlo pocas horas antes de acostarte, para que esto no aumente tu temperatura corporal y haga que tengas calor justo antes de dormir.

7. Aire acondicionado casero

Por último, si te gustaría dormir con el aire acondicionado encendido pero no dispones de este en casa o bien prefieres ahorrar y no encenderlo cada noche, hay algunas cosas que puedes hacer para refrescar la habitación.

Un ejemplo de ello es colocar un bol con hielo o agua muy fría en frente de un ventilador, que hará que el frescor del hielo se distribuya por toda la habitación. Además, esto también puede ser positivo para humedecer el ambiente, con lo que la sensación de frescor aumentará.

Otro truco para refrescar el dormitorio puede ser colgar sábanas mojadas en las ventanas o puertas del balcón, dejando así que el ambiente se humedezca conforme entra el aire por la ventana se entremezcle con el frescor de las sábanas y cree así un ambiente más óptimo para dormir.

Como ves, son varios los trucos que puedes llevar a cabo para tratar de evitar pasar calor por las noches. Recuerda que tu equipo de descanso puede tener mucho que ver en esto, así como el pijama que elijas o lo que cenes. Si quieres evitar el calor, ¡puedes tener todos estos aspectos en cuenta!