¿Por qué se pegan los bostezos?

Abr 16, 2019 | CURIOSIDADES | 0 Comentarios

Bostezar se considera un acto reflejo que ocurre con mayor frecuencia al estar cansados aburridos o al sentir hambre. Estas son las hipótesis más arraigadas entre la población. Bostezar y pegarse los bostezos está estrechamente relacionado con nuestros propios orígenes y evolución. Esta acción ha profundizado en las funciones básicas del sistema nervioso. No obstante, estas circunstancias no despejan la incógnita sobre su utilidad. En este sentido, si partimos de la base que bostezar es principalmente la acción de obtener aire en abundancia podemos deducir que se ocupa de oxigenarnos.

 

Entonces bostezar, ¿qué utilidad tiene?

El hecho de bostezar está asociado a diversas especies. Estas pueden abarcar desde el ser humano hasta un elefante o diferentes pescados. Según las distintas hipótesis que nos ofrece la ciencia el bostezo puede servir de utilidad para:

 

Refrescar el cerebro

Según esta teoría, bostezar serviría para ventilar nuestro cerebro. Este trascendental órgano necesita la mayor parte de las calorías que absorbemos. Esto significa un aumento considerable de temperatura intracraneal. De este modo, el hecho de introducir una gran cantidad de aire fresco posibilita al cerebro permanecer alerta y presentar un funcionamiento adecuado. Igualmente, esta acción origina que la mandíbula mueva las mucosas que conservan las fosas nasales; facilitando a su vez la ventilación de la masa cerebral.

Cada vez hay más teorías que refuerzan que bostezar sirve para ventilar nuestro cerebro y aumentar la temperatura intracraneal

Obtener mayor cantidad de oxígeno

Esta hipótesis está vinculada con la que hemos visto anteriormente pero de distinta forma. Cuando el organismo detecta una carencia importante en el nivel de oxígeno en el riego sanguíneo; bostezar supone un importante suministro de aire fresco que teóricamente permite equilibrar esa falta de oxígeno.

Por que bostezamos

¿Por qué se pegan los bostezos cuando vemos bostezar a alguien?

Como hemos mencionado anteriormente la acción de bostezar está ligada a diferentes especies del reino animal. No obstante, el contagio únicamente tiene lugar en el ser humano, simios, canes y lobos. Asimismo, se estima que el 60% de los seres humanos es vulnerable a esta involuntaria acción. Estas dos hipótesis discrepan entre sí, como vemos a continuación:

En una de ellas se considera como un acto de relacionarse y de sincronización. Entre las especies que presentan una mayor capacidad para relacionarse y organizar sus actividades; imitar el bostezo puede servir de sincronización. Este hecho puede ser similar a otras acciones igualmente contagiosas como alimentarse o adoptar determinadas posiciones corporales.

Los bostezos se pegan en una especie de acto de empatía y sincronización con la persona de al lado: más capacidad de relacionarse

La otra hipótesis se centra más en un estado de empatía. Esta posibilidad trataría de demostrar nuestras cualidades para intuir el estado de ánimo en que se encuentran otras personas. Este hecho nos pondría en su situación; sentir y notar lo que la otra persona siente, y una vez en este estado relajarnos y de manera inconsciente sucumbir al bostezo.

Según esta hipótesis, al imitar el bostezo se ponen en funcionamiento sistemas del cerebro característicos de la empatía, como las neuronas espejo. Estas neuronas trabajan como un reflejo en nuestro interior de las acciones que aprecian de los demás. Igualmente, el 60 % de personas vulnerables a la acción de bostezar suelen presentar un alto grado de empatía.