Trucos para que los niños consigan dormir la noche de reyes

Ene 5, 2020 | CURIOSIDADES, INFANTIL

En diciembre ya huele a Navidad. Las ciudades se llenan de luces, los escaparates se desbordan de ideas para pedir a los Reyes Magos y, los más pequeños de la casa comienzan a ponerse nerviosos. Faltan pocos días para que Sus Majestades pasen por casa y los niños ya saben que apenas podrán dormir la Noche de Reyes.

La emoción porque llegue la mañana y encontrar la casa llena de paquetes envueltos puede alterar el sueño de los hijos la noche del 5 al 6 de enero. De hecho, son muchos los padres que cuentan que su hijo les ha llamado a media noche o bien ha aparecido por el cuarto de los papás para intentar conciliar el sueño.

La mezcla de nervios, curiosidad y un poquito de miedo se convierte la Noche de Reyes en el peor enemigo para el sueño de los niños, pero hay varios consejos que se pueden seguir para intentar que los pequeños concilien el sueño y dejen que Sus Majestades los Reyes de Oriente puedan hacer su trabajo con tranquilidad.

Planear el sueño de los hijos en la Noche de Reyes

No solo los niños ven alterado sus ritmos en Navidad: las largas comilonas, la falta de obligaciones esos días, las visitas a la familia… hacen que los horarios se descuadren, y mayores y pequeños pierdan un poco los hábitos adquiridos durante el día a día de la época escolar.

El primer consejo a tener en cuenta para que los niños duerman del tirón en la Noche de Reyes es mantener, dentro de lo posible, los horarios habituales que se han llevado hasta finales de diciembre.

Si para ir al cole el hijo se va a la cama a las diez de la noche, lo recomendable es que en los días de vacaciones navideñas la hora límite para meterse bajo las sábanas no cambie más de una hora. De esta manera mantendrá los ciclos de actividad y descanso y la noche más mágica del año, pese a la excitación, conseguirá dormir.

La cabalgata y el roscón

Evidentemente, la Noche de Reyes es difícil mantener los horarios. Toca salir a ver cómo Sus Majestades llegan a la ciudad y luego, en la mayoría de las familias, se toma una buena porción de roscón. Esto hace casi imposible que los niños se puedan ir a su cama a la hora habitual. Sin embargo, hay que intentarlo.

Una opción sería adelantar el roscón a la merienda y ver la cabalgata al inicio de la misma. En la mayoría de ciudades, y siendo un espectáculo especialmente pensado para niños, la comitiva real comienza apenas ha caído el sol.

De esta manera también se evita que los peques se acuesten con el estómago lleno, algo que siempre empeora la calidad del sueño.

Evitar la siesta

Si nuestros hijos están habituados a dormir siesta, una opción puede ser eliminarla el día 5 de enero con el objetivo de que los protagonistas de la noche lleguen más cansados a la noche y busquen ellos mismos la cama a una hora prudente.

Un cuento y un abrazo

Aunque el niño ya esté acostumbrado a dormir solo, muchos expertos coinciden en que para ellos puede resultar complejo conciliar el sueño en periodos de excitación. Si hay un día en el año en el que los peques pueden estar más nerviosos de la cuenta este es sin duda el del 5 de enero.

En ese caso, un buen truco para ayudarles a dormir es tumbarnos con ellos en la cama. Conviene además contar una historia con la luz apagada para inducir el sueño. Este cuento no debe estar basado en los Reyes Magos, si no se logrará el efecto contrario.

Poco después del cuento, el adulto se deberá hacer el dormido, para así ‘obligar’ al niño a permanecer quieto. Poco a poco irá acompasando su respiración y caerá rendido al rato.

La mejor cama

Puede parecer una tontería, pero contar con un buen colchón y una almohada de calidad son ingredientes perfectos para generar sopor y sueño en los niños. Apostar por colchones especialmente pensados para niños es una apuesta segura para la calidad del descanso de los más pequeños y logrará que concilien el sueño hasta un día tan especial para ellos como la víspera de reyes.