Toppers: Todo lo que necesitas saber
¡Por supuesto! Igual que otros toppers de dimensiones variables, los sobrecolchones de 200 centímetros han de ser protegidos. Y las razones tienen que ver con cuestiones sanitarias, de higiene y del propio cuidado del topper.
Tal y como sucede con los colchones y las almohadas, los sobrecolchones pueden acumular suciedad en forma de polvo, cabellos humanos o líquidos. Factores todos ellos que pueden producir la aparición de sustancias nocivas para nuestra salud como ácaros, moho y bacterias. Gracias a la cuidada protección que proporciona la sábana bajera, podremos prevenir la aparición de estas sustancias, alargando así la vida útil del topper de 200.
Los sobrecolchones de 200 centímetros han de cambiarse siguiendo el mismo patrón que el resto de elementos que forman nuestro equipo de descanso: en el momento que nos demos cuenta de que nuestro descanso ha perdido cualidades o si encontramos que está deteriorado, roto o sucumbido ante la aparición de sustancias nocivas (humedad, moho…).
Es aquí, cuando no ofrece la misma calidad de origen y pierde prestaciones, cuando haya llegado el momento de sustituir el topper por un nuevo modelo. Sin embargo, desde Maxcolchon recomendamos que su uso esté limitado a segundas residencias, camas supletorias y habitaciones de invitados. Por ello, en el momento de que el topper tenga que ser sustituido, es aconsejable plantearse la opción de adquirir un colchón de más calidad que no precise de la ayuda de un sobrecolchón.
Si bien es cierto que la ayuda de un topper mejora nuestro descanso, más lo hace un colchón de gama alta que se adapte a nuestras necesidades de firmeza o transpirabilidad.
El sobrecolchón de 200 es uno de los mejores complementos que existen en el mundo del descanso. Útiles, versátiles y válidos sobre todo en segundas residencias y camas supletorias, suponen un extra confortable a las prestaciones originales del colchón.
Con la ayuda de la capa adicional prestada por el topper de 200, podemos aumentar la altura general del colchón. Tan solo hemos de colocarlo en la parte superior del colchón y alcanzaremos un descanso más suave, fresco y acogedor.
Además, gracias a la amplia variedad de materiales con los que se fabrican los toppers, los sobrecolchones son beneficiosos para todo tipo de durmientes.