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¿Dudas sobre los colchones viscoelásticos? Aquí te las resolvemos:

El tipo de protector que debemos utilizar para cuidar nuestro colchón viscoelástico y remar a favor de sus prestaciones es aquel que esté fabricado con materiales que luchen contra los ácaros, las bacterias, el moho y el derramamiento de líquidos.

Los cubrecolchones más adecuados para los durmientes son aquellos que, al disponer de los elementos anteriores, se convierten en una especie de barrera contra alergias, polvo, ácaros... Así, el durmiente es libre de problemas de salud, respiratorios y cutáneos.

Los colchones viscoelásticos disponen una serie de beneficios que vienen muy condicionados por el material con el que están confeccionados, el cual cuenta con propiedades muy válidas para el descanso.

Empezando por la capacidad que tienen de aliviar la presión del cuerpo, las personas que utilizan estos colchones sienten como su silueta se distribuye mejor a través del colchón, obteniendo cualquier parte del cuerpo un mejor apoyo óptimo.

Esta memoria inteligente que le permite al propio colchón recuperar su forma original cuando no recibe ningún tipo de presión le convierte también en un modelo muy relajante, suave, flexible y con un grado muy alto de adaptación. Sin importar la fisionomía del durmiente o sus características físicas.

Los colchones viscoelásticos son los que más independencia de lechos aportan a los usuarios. Por lo tanto, en el caso de dormir en pareja, los movimientos de un durmiente no se traspasan al cónyuge, permitiendo así un descanso menos sometido y libre de microsdespertares.

Por último, destacar que la innovación tecnológica que define a estos colchones los convierte en un producto muy duradero y apto para todo tipo de soportes. Además, no precisan del típico volteo como otros modelos.

Los colchones viscoelásticos más vendidos son aquellos cuyas prestaciones pueden estar condicionados por el núcleo del que disponen. En el caso de los modelos con adaptabilidad muy alta, cuentan con más densidad en el mencionado núcleo, lo que aporta mayor sensación de descanso y confort. Además, son modelos que pueden disponer de mayor durabilidad que otros y, sobre todo, los que mejor capacidad de adaptación ofrecen al cuerpo y a los movimientos del durmiente.