¿La siesta engorda?

Ago 31, 2022 | CONSEJOS, ALIMENTACION | 0 Comentarios

Nuestro peso corporal, así como nuestro índica de masa corporal dependen de una multitud de factores. Como bien sabrás, tanto el estilo de vida como la genética juegan un papel fundamental en ello. Pero, ¿qué hay de la siesta? ¿La siesta engorda?

Hay quien cree en esta premisa: esas personas que duermen la siesta después de dormir acumulan más grasa en el cuerpo. Pero ¿cuánto de verdad hay en esta creencia?

La relación entre dormir mal y la obesidad

A día de hoy, es bien sabido que nuestro peso corporal está determinado por muchos factores. La genética, el nivel socioeconómico, el estrés, el entorno comunitario y la salud en general juegan un papel en nuestro peso y nuestro índice de masa corporal. Pero quizá te sorprenda saber que el descanso también tiene un papel en ello.

De hecho, tal y como indica una revisión publicada en 2011, la falta de sueño es uno de los factores de riesgo de la obesidad.

La privación del sueño puede conducir a un aumento de peso

La falta de sueño puede crear un desequilibrio hormonal en nuestro cuerpo que promueve comer en exceso y aumentar de peso. La leptina y la grelina son hormonas que regulan el apetito, y cuando no dormimos lo suficiente, la producción de estas hormonas se altera de manera que se crea una mayor sensación de hambre.

La privación del sueño está asociada con la deficiencia de la hormona de crecimiento y los niveles elevados de cortisol, los cuales se han visto relacionados con la obesidad. Además, la falta de sueño puede afectar al metabolismo de los alimentos.

Por desgracia, los efectos de la falta de sueño sobre el peso no se limitan a cambios a nivel químico. Se ha demostrado que la duración restringida del sueño provoca una mayor tendencia a seleccionar alimentos ricos en calorías.

Las calorías consumidas por la noche aumentan el riesgo de aumento de peso. Además, los adultos que no duermen lo suficiente hacen menos ejercicio que los que sí lo hacen, posiblemente porque la falta de sueño provoca somnolencia y fatiga durante el día.

Dicho esto, ¿qué papel tiene la siesta en nuestro peso corporal? ¿Ocurre lo mismo con la siesta que con la falta de sueño y eso nos hace engordar?

La siesta engorda

¿La siesta engorda?

¿Alguna vez has oído hablar del mito de que la siesta engorda? Al parecer, se trata de un enunciado muy extendido, relacionado con que esas personas que hacen una siesta después de comer tienen más probabilidades de engordar.

Sin embargo, parece que, hasta el momento, la investigación al respecto no ha encontrado una asociación clara entre la obesidad y la siesta. Lo que sí está claro es que el hábito de dormir mucho al mediodía hace que nos estanquemos, haciendo que se quemen pocas calorías.

Por otro lado, quedarse despierto hasta tarde, despertarse tarde y, por tanto, comer tarde, puede aumentar el riesgo de que aumentemos de peso.

Sin embargo, no se trata del patrón de comer y dormir lo que conduce al aumento de peso, sino el aumento de calorías y opciones de alimentos que mantienen las personas que tienen este patrón del que hablábamos, que en realidad nada tiene que ver con la siesta.

Y es que, al parecer, en promedio, las personas que se quedan despiertas y duermen hasta tarde consumen 248 calorías más al día, el doble de comida rápida, más refrescos y menos frutas y verduras que las personas que se acuestan más temprano.

Cómo hacer una siesta saludable

Una siesta de alrededor de 20-30 minutos por la tarde puede ser ideal para recuperar la energía. Algunos pasos que te pueden ser de ayuda para llevar a cabo una siesta saludable son:

  • Haz la siesta justo después de comer: no te esperes a hacer la siesta por la tarde. Si crees que vas a necesitar recuperar la energía, una power nap justo después de haber comido puede ser la mejor opción.
  • Pon una alarma: este paso es esencial si no quieres arriesgarte a que la siesta se te vaya de las manos. Una buena siesta puede durar entre 10 y 30 minutos: más tiempo podría hacerte sentir somnoliento.
  • Deja de lado las preocupaciones: Trata de no darle vueltas a los problemas cuando te acuestes un rato, dado que esto podría mantenerte despierto. Si tienes problemas para dejar de lado las preocupaciones, intenta practicar ejercicios de relajación para que te sea más fácil conciliar el sueño.
  • Crea un buen ambiente para dormir: para conciliar el sueño, el espacio debe ser propicio para dormir a gusto. Es importante que cuentes, para ello, con un buen equipo de descanso: aunque solo sean unos minutos los que vas a echarte, agradecerás tener un lugar cómodo en el que dormir.

Si te habías preguntado alguna vez si la siesta engorda y habías evitado hacerla por esta razón, ¡ahora sabes que se trata de un mito! Hacer una pequeña siesta puede ser de gran ayuda para continuar con el día. ¿Lo has probado?