Cómo prevenir la alergia a los ácaros

Jun 10, 2020 | CONSEJOS

Habitan entre nosotros. Concretamente en el polvo doméstico (y gracias a él), alimentándose básicamente de escamas humanas (es decir, el desprendimiento visible de las capas externas de la piel) o de nuestras mascotas. Aunque las podamos asociar a la primavera, pueden aparecer en cualquier estación del año para causar esas molestas enfermedades y alergias respiratorias (desde rinitis hasta el asma bronquial pasando por conjuntivitis) al mencionado polvo. Contienen bacterias y moho. Sí, hablamos de los ácaros y de cómo prevenir su alergia.

9 consejos que mantendrán tu casa libre de ácaros

Según estimaciones de los expertos, en un hogar de un tamaño normal (entre 80 y 90 metros cuadrados) se puede acumular hasta cuatro kilos de polvo al año. O lo que es lo mismo: entre un 70% de células de piel o partículas grises y marrones, aproximadamente un 20% de fibras y hasta un 5% de pelos (humanos y de origen animal). Con un hábitat así, la proliferación de ácaros es sinónimo de síntomas para los alérgicos al polvo. Y de esos polvos, estos estornudos, picores, mucosidades y lagrimeos.

Aunque los ácaros, pertenecientes a las familias de los arácnidos, son inofensivos, sus excrementos son los que pueden generar peligro, ya que contienen altos niveles de proteínas alérgicas. Las mismas que van a provocar procesos de alergia y hasta crisis de asma.

Para prevenir la aparición de estos seres tan indeseables y poco saludables, es necesario realizar limpiezas en profundidad de todo nuestro hogar. Y además de ello, seguir los siguientes consejos:

– Empezamos por nuestro equipo de descanso, al cual hemos de proteger al máximo. Para ello, en Maxcolchon recomendamos el uso de la Funda Doble de Tencel para el colchón. Gracias a ella, mejoraremos el contacto con el usuario con la capa superior y con la inferior conseguiremos dotar de impermeabilidad el colchón, mejorando así la higiene. Respecto a la almohada, la Funda Tencel protegerá al durmiente gracias a su capacidad antialérgena. Y para los más pequeños, la Funda Tencel para cunas.

– Una vez equipada nuestra cama con los mejores complementos posibles, comienzan una serie de tips cotidianos que nos van a permitir prevenir la aparición de ácaros. Por ejemplo, acostúmbrate a descalzarte y ponerte un calzado limpio cada vez que vuelvas de la calle. Para su limpieza y mantenimiento, teniendo en cuenta que una cama puede concentrar hasta 10000 ácaros, aspira el colchón una vez al mes y lava las fundas de la almohada a más de 60 grados. Semanalmente, aspira la habitación poniendo mucho énfasis en los alrededores de la cama.

– Derivado del punto anterior, el felpudo de la casa es uno de los mayores focos de gérmenes que existen. Es por ello que resulta más recomendable añadir una alfombrilla lavable en la puerta de entrada.

– Si tu suelo es de madera, tendrás menos posibilidades de que aparezca ácaros. Si por el contrario has cubierto tu suelo con alfombras, tus opciones se multiplicarán. En el caso del suelo de madera o parque, es aconsejable pasar el aspirador una o dos veces por semana.

 – Los sofás pueden tener otro gran cartel iluminado que diga bien grande “¡Ácaros, sois bienvenidos!”.  Es por ello que es mucho mejor tener un sofá de cuero que con tapicería.

– Siguiendo con el salón, nos encontramos con el lugar de la casa que mejores condiciones reúne para dar cobijo a estos arácnidos: humedad, oscuridad, alimentos… Además de los mencionados sofás, las cortinas también son un gran foco atractivo para los ácaros. Esto ocurre porque al ventilar el comedor, las cortinas atraen el polen del ambiente exterior. Para evitar todo ello, mueve los muebles una vez al mes para aspirar cada esquina del salón.

– Si nos trasladamos a otros puntos de la casa, tanto en el baño como en la cocina puede aparecer moho. Esta sustancia, al esparcirse por el aire, es otra de las causantes de la alergia. Mantener una limpieza exhaustiva de estos dos lugares (al menos un par de veces por semana) evitará este tipo de situaciones.