Dormir bien disminuye el estrés y la ansiedad

Jul 26, 2020 | CONSEJOS, DESCANSO

La vida que llevamos es estresante de por sí. Nuestro día a día se caracteriza por una serie de estresores diarios a los que hemos de sumar los imprevistos que pueden ocurrir en nuestro trabajo, en casa, en nuestras relaciones personales… Más aún con los tiempos que corren, no podemos más que aceptar que el estrés y la ansiedad están a la orden del día.

Estas dos afecciones pueden tener una mala influencia sobre el sueño, así como el hecho de no dormir lo suficiente puede tenerlo sobre la ansiedad y el estrés. Y esto, sin duda, tiene un impacto directo sobre nuestras vidas, siendo que incluso puede convertirse en un círculo vicioso en el que el estrés, la ansiedad y el insomnio se retroalimentan y dificultan nuestro día a día.

¿Te cuesta dormir por las noches?

Hay muchas razones por las que puedes estar sufriendo de insomnio. Si estás estresado, será más complicado que concilies el sueño con normalidad. Por lo general, aquellas personas que sufren de estrés y ansiedad en su vida diaria duermen menos y su sueño es de peor calidad.

Y es que parece haber una clara relación entre la falta de sueño y el estrés. Al parecer, la presencia de estrés aumenta los niveles de cortisol, una hormona que estimula el estado de vigilancia y alerta, elevando la frecuencia cardíaca y la presión arterial. Por lo general, nuestros niveles de cortisol tienden a disminuir cuando llega la tarde, como una especie de preparación natural que el cuerpo crea para irse a dormir.

Cuando estos niveles son altos por la noche, esto interfiere con la liberación de melatonina, una hormona esencial para la regulación de los ciclos sueño-vigilia. Por si esto fuera poco, la falta de sueño en sí misma puede influir aún más en el cortisol, haciendo que los niveles aumenten en momentos que en otra ocasión serían bajos.

El estrés también altera nuestros niveles de sueño. Investigaciones al respecto han podido demostrar que el estrés disminuye el tiempo que pasamos en el sueño ligero y profundo, así como aumenta el tiempo que pasamos en el sueño REM.

Lo negativo de esto es que, cuando pasamos mucho tiempo en el sueño REM, esto puede causar somnolencia y fatiga durante el día, lo que puede alterar aún más los ciclos normales del sueño y el estado de ánimo.

Dormir bien disminuye el estrés y la ansiedad

Un buen descanso es un gran aliado de nuestra salud física, pero también lo es para reducir el estrés. Seguir una rutina de sueño regular puede ayudarnos a restaurar nuestras funciones vitales: desde mejorar la concentración hasta regular nuestro estado de ánimo y agudizar el juicio y la toma de decisiones.

Cuando descansamos correctamente, nuestra mente está más despejada para solucionar los problemas y esto nos hace más capaces para lidiar con el estrés. Mientras, la falta de sueño reduce nuestra energía y disminuye la claridad mental.

La investigación al respecto ha demostrado que la falta de sueño te hace más reactivo emocionalmente, así como más impulsivo y más sensible a los estímulos negativos. Estas deficiencias cognitivas impulsadas por la falta de sueño pueden generar estrés y ansiedad: desde crear dificultades en nuestras relaciones personales hasta causar problemas en el desempeño laboral.

Otras investigaciones al respecto señalan que en casi todos los trastornos psiquiátricos se dan problemas para dormir bien o del tirón. Al parecer, las personas con insomnio crónico tienen un alto riesgo de desarrollar un trastorno de ansiedad.

Estas deficiencias cognitivas impulsadas por el sueño pueden generar estrés en muchos ámbitos de nuestra vida: desde nuestro trabajo hasta nuestras relaciones personales. Por eso, un buen descanso puede ser la clave para mantener alejados tanto los síntomas de ansiedad como los de estrés.

¿Qué puedo hacer si la ansiedad me afecta a la hora de conciliar el sueño?

Como habrás podido ver, la ansiedad y el insomnio van muchas veces de la mano. Por eso a continuación te dejamos algunas recomendaciones que podrían servirte tanto para manejar el estrés y la ansiedad como para descansar mejor:

Haz ejercicio regularmente

Quienes hacen deporte tienden a dormirse más rápido y su sueño es más profundo. De hecho, un entrenamiento de intensidad moderada, como andar rápido, puede mejorar el sueño en personas con insomnio crónico.

Tómate tu tiempo para relajarte antes de dormir

Una rutina antes de irte a dormir permitirá que tu cuerpo y tu mente disminuyan su velocidad antes de que se apaguen las luces. Tómate al menos media hora para escuchar música tranquila, darte un baño o leer un libro.

Mantente alejado de actividades estresantes antes de acostarte

Llevar a cabo actividades muy estimulantes antes de ir a dormir puede resultar estresante para tu cuerpo y retrasar la hora en la que concilies el sueño. Utilizar demasiado el móvil o el ordenador antes de ir a dormir puede tener consecuencias negativas tanto para los síntomas de ansiedad como para el estrés, debido a la luz que emiten ambos.