Escalofríos al dormir: ¿Por qué aparecen?

Jun 29, 2022 | CONSEJOS, DESCANSO | 0 Comentarios

¿Alguna vez te ha ocurrido? Llegas a la cama y, de repente, sientes escalofríos que hacen que te sea más complicado quedarte dormido. ¡Y eso que cuentas con un buen edredón para taparte y que la temperatura ambiente no es demasiado fresca!

Parece ser que la temperatura de la habitación no es la única responsable en la aparición de estos escalofríos, y que podría ser la temperatura interna la principal responsable de estos escalofríos al dormir. Veamos por qué y cómo se produce este fenómeno.

Escalofríos al dormir: ¿Por qué se dan?

La temperatura es una parte importante del ritmo circadiano. Y es que la temperatura de nuestro cuerpo pasa por un ciclo diario que se correlaciona con los patrones de sueño y vigilia.

Al parecer, tal y como explican investigadores del Imperial College de Londres, durante las horas previas a acostarnos solemos experimentar una reducción natural de la temperatura corporal, y esto suele continuar una vez nos quedamos dormidos.

Al mismo tiempo, la temperatura de la piel aumenta antes y después del sueño. A lo largo de la noche, nuestros cuerpos experimentan la termorregulación, que involucra procesos físicos que mantienen la temperatura de nuestro cuerpo dentro de un rango concreto. Si tenemos mucho frío, los escalofríos nos ayudan a entrar en calor. Si tenemos calor, el sudor libera el mismo.

A veces, el equilibrio entre el calor y el frío se altera hasta el punto en el que estos procesos de termorregulación hacen que nos despertemos. Despertarse temblando de frío o de calor y con sudores puede resultar bastante incómodo, y suele deberse a que el ambiente de nuestra habitación es demasiado frío o demasiado cálido.

Aunque los escalofríos podrían estar relacionados con alguna enfermedad más que con la termorregulación, lo habitual es que podamos evitarlos tomando algunas medidas.

Cómo evitar los escalofríos al dormir

Si padeces alguna enfermedad que pueda tener como efecto estos escalofríos, deberías consultar con tu médico sobre qué puedes hacer para evitarlos. Sin embargo, si eres de esas personas que no sufre ninguna enfermedad y simplemente tiene un problema de escalofríos relacionado con la termorregulación y la temperatura ambiente, presta atención a los siguientes consejos:

Escalofríos al dormir

Mantén una temperatura agradable en el dormitorio

Una temperatura alrededor de los 18 grados puede ser la más óptima para el ambiente del dormitorio. Aún así, es posible que tus necesidades en cuanto a la temperatura sean otras, por lo que puedes aumentarla o disminuirla si eso te ayuda a evitar los escalofríos cuando duermes.

Utiliza un buen pijama

Aunque pueda parecer algo sin importancia, el pijama que utilicemos puede tener mucho que ver con la calidad de nuestro descanso. Si sueles pasar calor por la noche, entonces quizá debas experimentar utilizando un pijama más transpirable. Si, por el contrario, sientes que tienes frío, entonces lo mejor será que utilices más capas de ropa, que puedes ir retirando si acabas pasando calor.

¿Es posible que tengas fiebre?

Si los escalofríos se han producido en una noche puntual y no es algo habitual en ti, entonces cabe la posibilidad de que hayas tenido fiebre. Los escalofríos son habituales cuando estamos enfermos, así que si has tenido escalofríos esta noche, quizá debas tomarte la temperatura.

Usa una bolsa de agua caliente o un ventilador

Si crees que pasas frío o calor por la noche, puedes remediarlo utilizando una bolsa de agua caliente o bien un ventilador, según tengas frío o calor. Un ventilador en el dormitorio puede ayudarte a refrescar el ambiente, mientras que incluir una bolsa de agua caliente o una almohadilla térmica en la cama puede ser de ayuda si los escalofríos han sido causados por el frío.

Como ves, los escalofríos pueden ser normales cuando nuestra temperatura, o la del dormitorio no es la óptima. En cualquier caso, si tienes escalofríos a menudo, lo mejor será que consultes con un profesional de la salud.