Potencia el confort: Descubre los beneficios de los colchones firmes

Nov 12, 2022 | CONSEJOS, PRODUCTOS | 0 Comentarios

Cuando llegamos a ese momento en el que nos toca cambiar el colchón, reflexionamos sobre las prestaciones que mejor se adaptan a nuestro descanso. Ahí es cuando palabras como adaptabilidad o firmeza se vuelven fuertes y analizamos qué niveles necesitamos. Poniendo el foco en uno de esos puntos imprescindibles, una de las decisiones principales girará en torno a los duros o blandos que puedan ser los colchones. ¿Qué beneficios encontraremos en los modelos más firmes? ¿Son los más recomendados? ¿Tienen ventajas respecto a los colchones más blanditos?

5 ventajas de dormir en un colchón firme

La firmeza es uno de los factores principales que se debe tener en cuenta a la hora de elegir un colchón. Los modelos con un nivel de firmeza más alta disponen de una serie de ventajas que mejorarán nuestra higiene del sueño. Sobre todo, en personas como problemas de obesidad, con determinadas patologías y niños.

1. Mejoran la calidad del sueño

Al aportar un mayor equilibrio y distribuir de manera más óptima el peso corporal, los colchones firmes pueden erigirse como la mejor elección posible. Hay que tener en cuenta que el exceso de blandura puede jugar en contra de la calidad de nuestro descanso. ¿Por qué? Al ofrecer menor soporte, los colchones menos firmes pueden provocar que nuestros cuerpos tengan peor equilibrio. Es decir, las diferentes partes del cuerpo no recibirán el mismo nivel de sujeción. Por el contrario, los colchones firmes garantizan uso niveles de soporte excelentes, ayudando así al sueño profundo y reparador.

2. Confort óptimo

En la búsqueda incansable hacia la excelencia de nuestro descanso, existe una máxima que debemos saber: el exceso de sujeción, soporte y firmeza nunca va a jugar en contra del descanso. Por el contrario, en la ausencia de firmeza sí hallaremos consecuencias menos positivas para la calidad de nuestro sueño.  Un colchón firme garantiza ese confort en todo tipo de durmientes, pero, sobre todo, en aquellos con problemas físicos o de edad más avanzada.

3. Ayudan a mantener la postura correcta

La firmeza es la prestación de los colchones que mejor puede ayudar al mantenimiento correcto de nuestra postura. A la hora de dormir, tenemos que tratar que la posición que adoptamos fomente la alineación más óptima de nuestra espalda (y, por lo tanto, de la columna vertebral). Imagina dormir de manera que esto no ocurra. Y que esas noches se vayan sumando (multiplica por las ocho horas recomendadas de descanso). Por todo ello, un colchón muy firme se convertirá en el soporte más adecuado para alinear nuestra espalda y evitar cualquier tipo de presión sobre esta parte del cuerpo.

4. Distribuyen mejor el peso corporal

Un colchón que ofrece un apoyo insuficiente y un soporte desequilibrado provocará esa sensación de hundimiento en el colchón que no facilita el descanso. Y la primera consecuencia y la más inmediata será la de dormir en malas posturas, lo cual acarrearía en problemas físicos. Sobre este telón de fondo hay que tener en cuenta que el físico influye muchísimo en la valoración de un colchón. Es decir, para decantarnos por un modelo u otro hay que tener en cuenta nuestra propia fisionomía. No será lo mismo el descanso para una persona de 60 kilos y 170 centímetros de altura que para alguien más corpulento.  

colchones firmes

5. Dan sujeción al cuello

Al igual que sucede con la espalda, el cuello es la otra parte del cuerpo que más debemos cuidar y mimar mientras dormimos. E igual que hemos comentado en el punto relacionado con la columna vertebral, un colchón firme otorgará una sujeción más óptima de nuestro cuello, fomentando una posición correcta durante toda la noche.