Cómo dormir con tos: 7 trucos para aliviar la tos de noche

Cómo dormir con tos durante la noche puede convertirse en un desafío que no solo nos va a afectar la calidad del descanso en sí, sino que también influirá en la vida diaria y, por ende, en la salud en un nivel general.
Un problema que, muchas veces, va más allá de la simple interrupción del sueño. Y es que en estas situaciones, nos vamos a enfrentar a despertares continuos y, aún peor, también vamos a incordiar el sueño natural de nuestras parejas.
En este artículo de Maxcolchon vamos a abordar ciertos trucos y métodos caseros, además de algunas posiciones para dormir sin toser que nos ayudarán a superar este problema de salud tan asociado a la noche. ¿El objetivo? No perder calidad de sueño.
Se puede dormir con tos
La tos nocturna puede convertirse en un obstáculo para un sueño reparador, pero has de saber que existen métodos efectivos para mitigar sus molestias.
7 Métodos para dormir con tos
¿Qué puedo hacer para dormir si tengo tos? Aunque en la farmacia existen una infinidad de tratamientos que se pueden utilizar para combatir esta reacción involuntaria, también existen numerosos remedios naturales tradicionales que pueden ayudarte a suavizarla.
Sabemos que dormir con tos puede llegar a ser muy molesto y puede provocar que no tengamos un descanso reparador, y como consecuencia no estemos en plenas facultades el día siguiente. Por ello, hemos recogido trucos para no toser y aplicar en todas esas noches en las que decimos eso de “la tos no me deja dormir”.
1. Vapores de hojas de eucaliptos
El vapor es uno de los mejores remedios caseros para combatir la tos, la congestión nasal y el resfriado. Puedes poner a hervir en una olla unas cuantas hojas de eucalipto con agua. Tras esto, inhala el vapor durante 20 minutos. Puedes hacerlo cubriendo la olla y tu cara con una toalla a fin de que el vapor no se escape.
2. Infusiones de ajo o cebolla
El ajo es un vegetal rico en alicina, una sustancia con propiedades antisépticas que puede ayudar a nuestro organismo a combatir la gripe y la tos seca. Tanto el ajo como la cebolla pueden ser buenos aliados para combatir algunos síntomas gripales y te ayudarán a sentirte mejor. Si su sabor te parece demasiado fuerte, puedes endulzarlas con miel.
3. Jarabe de miel, limón y jengibre
Mezcla en un frasco con tapa un par de rodajas de limón, dos cucharadas de jengibre picado y un poco de miel. Cierralo y déjalo en la nevera hasta que se forme una capa gelatinosa. Para tomar este remedio casero contra la tos solo tendrás que mezclar una cucharada de este jarabe con un poco de agua caliente. Este jarabe puede conservarse en la nevera hasta tres meses en buen estado, sin perder sus propiedades.
4. Gárgaras de sal
Otro remedio para aliviar la tos seca consiste en hacer gárgaras con agua y sal. Para llevar a cabo esta solución oral solo tenemos que verter una cucharada de sal en un vaso de agua tibia. Puedes hacerlo varias veces al día.
5. Tomar uva
Esta fruta contiene distintas propiedades beneficiosas para el organismo como un alto contenido en fibra y potasio. No obstante, uno de los beneficios más desconocidos de la uva quizás sea su función como expectorante natural. Si tienes ataques de tos continuos puedes probar a comer uvas al menos una vez al día. Otra opción es hacer con ellas un zumo. Puedes añadirle un poco de miel para hacerlo más dulce.
6. Instalar un humidificador en la habitación
Muchas veces la tos aparece cuando el ambiente está muy seco. Con este aparato no solo mejorarás la humedad de la habitación, sino que, además evitarás la proliferación de ciertos virus y bacterias.
7. Utilizar almohadas adicionales
Podemos utilizar estos elementos extras que forman nuestro equipo de descanso para levantar nuestra cabeza y el torso. De este modo, los pulmones y la garganta estarán elevados en relación con el resto del cuerpo y se reducirá el drenaje de mucosidad hacia la garganta que activa el reflejo de toser.
Cuál es la mejor posición para dormir con tos
Una de las razones principales por la que la tos nocturna es más acentuada que la diurna tiene que ver con nuestra posición corporal. Al estar tumbados o estirados las vías respiratorias se obstruyen con mayor facilidad y nuestro organismo, a modo de mecanismo de defensa, tose.
Las consecuencias directas que podemos sufrir cada noche son:
– Falta de descanso por despertares.
– Irritación en la garganta.
– Molestias para las personas que duermen cerca.
– Posibilidad de atragantarse con la saliva o la inflamación.
Cuando nos enfrentamos a este tipo de disyuntiva, es porque el moco generado por nuestro cuerpo ha irritado la garganta. Y, por ello, uno de los consejos que ya hemos visto, y en el que tenemos que incidir, es el de la posición al dormir.
La postura ideal para evitar esas noches en vela tosiendo, es inclinar nuestra cabeza de manera ligera con la ayuda de unas almohadas extra. No estamos diciendo que sea necesario dormir sentado, porque eso no facilitaría la conciliación ni la calidad del sueño. Simplemente, aconsejamos elevar la cabeza suavemente para, así, dejar que la gravedad pueda hacer su trabajo. Es decir, ya sea boca arriba o de lado, la finalidad es permitir que la mucosidad se desplace, aliviando por tanto la irritación de la garganta.
Cómo calmar la tos seca
¿Cómo dormir sin toser? La tos seca está asociada con condiciones como el reflujo gastroesofágico, asma, goteo postnasal, inhibidores de la ECA e infecciones respiratorias superiores. En general, trastornos que nos van a generar molestias. Sin embargo, has de saber que se puede tener tos en la noche sin estar resfriado. Por tanto, desde Maxcolchon hemos aglutinado algunos consejos para encontrar alivio.
Pastillas para la garganta: Muchas de las veces en las que nos hemos preguntado cómo dormir si tengo tos seca, la respuesta era tan sencilla como las diferentes variedades de pastillas para la garganta. Desde el mentol a la vitamina C pasando medicamentos para aliviar el dolor de garganta. Eso sí, asegúrate de terminar la pastilla antes de acostarte para evitar riesgos.
Descongestivo: El uso de descongestivos puede secar ese goteo postnasal tan molesta. Eso sí, no es una toma aconsejable para administrar en niños menores de 12 años por la aparición de posibles complicaciones.
Supresor de la tos: Un supresor de tos, como su propio nombre indica, es el responsable de bloquear el reflejo de toser y, por tanto, puede ser un producto útil para prevenir la tos nocturna seca al dormir.
Hidratación constante: Para mantener la garganta bien lubricada durante la noche, es aconsejable beber líquidos durante el día. De esta manera, la vamos a proteger de la irritación ya comentada. Recomendamos ingerir unos ocho vasos de agua diarios, aunque el último es mejor tomarlo una hora antes de dormir para evitar las micciones nocturnas que interrumpan tu sueño.
Cómo calmar la tos húmeda
La tos húmeda, también conocida como tos productiva, suele estar vinculada a la acumulación de mucosidad en el pecho, garganta y boca. Aquí tienes algunos consejos para aliviarla:
Eleva la cabeza y el cuello: Evita que la mucosidad se acumule en la garganta al dormir. Como ya hemos comentado, para calmar esa tos más húmeda debes añadir almohadas adicionales para elevar suavemente la cabeza y el cuello. No es aconsejable añadir muchas ni, por supuesto, dormir sentado. Ambas situaciones provocarían un exceso de elevación que desembocarían molestias en el cuello.

Usa un expectorante: La ingesta de medicamentos expectorantes que limiten la acumulación de mucosidad y, por ende, la tos productiva, también te ayudará a mejorar la calidad de tu sueño nocturno.
Toma miel: Según un estudio, tomar dos cucharaditas de miel antes de dormir ayudó a algunos niños con tos a conciliar un sueño más profundo.
Bebidas calientes: Es muy saludable que, antes de dormir, tomemos algún tipo de bebida caliente. Por ejemplo, un vaso de leche con miel, agua con miel y limón o algún tipo de té con hierbas. También es aconsejable cenar caldos y sopas que pueden calmar esa irritación de la garganta y, por tanto, aflojar la mucosidad.
Toma un baño caliente: Cómo parar la tos de noche también puede conseguirse mediante la preparación de un baño caliente. Esto se debe a que el vapor generado durante la ducha puede ser beneficioso para suavizar la mucosidad en el pecho y los senos paranasales, facilitando un despeje de las vías respiratorias.
Cómo calmar la picazón de garganta
La tos con picazón, especialmente derivada de alergias o goteo postnasal, puede convertirse en una molestia persistente que afecta tu sueño. ¿Cómo dormir para evitar toser y no sufrir esa picazón en la garganta?
- Humidificador para un ambiente equilibrado:
El aire seco puede irritar la garganta y desencadenar la tos con picazón. Utiliza un humidificador para mantener un nivel de humedad del 50%. Asegúrate de no excederte, ya que un exceso de humedad puede empeorar los alérgenos y, por tanto, desencadenar nuevos problemas.
- Utilizar ropa de cama limpia también mejora el descanso
La limpieza regular de sábanas, fundas de colchón, mantas y fundas de almohada es esencial para mantener una higiene. Además, ahora ya sabes que puede beneficiar el alivio de la tos, sobre todo si eres propenso a alergias.
En definitiva, la aplicación de estos consejos puede marcar la diferencia a la hora de calmar el picazón en la garganta y disfrutar de una noche sin padecer la molestia de la tos con picazón.
Por qué toso más cuando estoy enfermo
El descenso de temperaturas propio del otoño a menudo hace que vuelvan a aparecer algunas enfermedades típicas de esta época del año. Una de las más frecuentes es la tos, una infección de las vías respiratorias que puede llegar a ser muy molesta.
Si bien la tos puede aparecer en cualquier momento del día, durante la noche aumenta la probabilidad de que se produzca algún episodio más incómodo. Y la razón principal de esto tiene que ver con la posición de nuestro cuerpo. Al estar tumbados o estirados en la cama, las vías respiratorias se obstaculizan con mayor facilidad. La congestión empeora y, por ende, se agudizan los síntomas.
Cómo afecta tener tos al sueño
Cuando experimentamos un resfriado no solo lidiamos con esas molestias físicas tan abrumadoras. Además, sufrimos una serie de consecuencias del propio resfriado. Por ejemplo, una disminución en la conciliación de nuestro sueño. Y es que más allá de la tos, la suma de los síntomas puede afectar nuestro descanso nocturno.
Así es cómo cada aspecto de un resfriado puede influir en tu capacidad para dormir profundamente según varios estudios científicos que recogemos a continuación:
- Más del 40% de las personas aseguran que duermen peor de lo habitual cuando sufren un resfriado.
- El 46% experimenta dificultades para dormir bien durante un episodio de resfriado o gripe.
- El 94% señala que los síntomas del resfriado los despiertan durante la noche.
El dolor de garganta, otro síntoma común, puede intensificarse al tragar, afectando aún más la tranquilidad durante el descanso. La congestión nasal, que dificulta la respiración, se convierte en un desafío adicional para mantener un sueño tranquilo y sin interrupciones. La necesidad frecuente de estornudar también se suma a los factores que afectan la continuidad del sueño, generando más despertares y, peor aún, mucho más repetidos.
A medida que la fiebre se manifiesta, los sueños febriles pueden convertirse en una experiencia común. Este fenómeno no solo afecta la calidad del sueño, sino que contribuye a un descanso inquieto, dificultando la capacidad de conciliar el sueño de manera efectiva. La fiebre misma, como síntoma, agrega un componente adicional al desafío de dormir, afectando el bienestar general durante la enfermedad.
Cuando nos enfrentamos a la enfermedad, la tos se convierte en el principal protagonista de los desafíos para dormir, pero también debemos saber que otros síntomas, como el malestar general y la necesidad de descanso adicional, desempeñan su propio papel en la alteración del ritmo de sueño habitual.
Consejos para dormir con tos: Conclusiones
Enfrentarse a la tos durante la noche puede desafiar la calidad del sueño y afectar nuestra vida diaria. Sin embargo, con estrategias prácticas y cambios simples, es posible mitigar estas molestias y disfrutar de un descanso más reparador.
En definitiva, estas son las conclusiones de cómo podemos mitigar la tos por la noche:
Posiciones estratégicas: Elevar la cabeza con almohadas adicionales puede reducir la irritación en la garganta y facilitar la respiración, aliviando la tos.
Remedios caseros: Desde vapores de eucalipto hasta infusiones de ajo, hay opciones naturales que pueden suavizar la tos y proporcionar alivio.
Hidratación: Mantenerse hidratado durante el día y evitar líquidos antes de acostarse puede ayudar a calmar la garganta y reducir la tos.
Ambiente adecuado: Un humidificador puede mejorar la humedad en la habitación, aliviando la tos asociada con ambientes secos.
Cuidado personalizado: Es recomendable cierta ingesta de antihistamínicos para tos con picazón, y pastillas o jarabes para tos seca. En definitiva, adáptala a tus propias necesidades específicas.
Pon remedio también a la tos húmeda: Expectorantes, bebidas calientes y elevar la cabeza son estrategias efectivas para abordar la tos húmeda, quizás la menos recurrente.
Atención a la higiene del sueño: Mantener sábanas y almohadas limpias, junto con una buena ventilación en la habitación, contribuye a un descanso saludable.
Implementar estos consejos puede marcar la diferencia, ofreciendo noches más tranquilas y un sueño reparador incluso en medio de la tos.