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Sábanas: Todo lo que necesitas saber

A la hora de lavar las sábanas es importante prestar atención a la etiqueta. En ella se indicará el tratamiento que requieren, que será especificado por el fabricante. Por lo general, las indicaciones más comunes que suelen incluir es que no se utilicen temperaturas altas.

De cualquier manera, te recomendamos echar un vistazo a la etiqueta o consultar con la marca antes de lavar tu nuevo juego de sábanas de 80.

Como su nombre indica, un juego de sábanas de 80 está formado por el conjunto de la sábana bajera (la que cubre el colchón), la sábana encimera (con la que nos tapamos normalmente) y la funda de la almohada

Las sábanas tienen varias funciones. Para empezar, tienen una función higiénica: la sábana bajera, por su parte, se ocupa de proteger el colchón a la vez que evita que estemos en contacto directo con este. En el caso de la sábana encimera, esta se ocupa de ser el primer contacto que tenemos para taparnos por las noches, que en verano suele ser suficiente (en algunos sitios). En invierno, solemos utilizar otras capas encima de esta sábana como un edredón o una colcha.

 Por su parte, la funda de la almohada se encarga de cubrir la almohada a la vez que evita que nuestra cabeza (y la posible piel muerta o caspa que podamos desprender) esté en contacto directo con ella.

Si estamos en busca de una opción económica y cómoda, tenemos disponibles los juegos de sábanas de 80  en 50% algodón 50% poliéster. Se trata de una opción con material sintético (el poliéster) que no se estropea tanto al lavarlo. Es por eso que resultan especialmente recomendables para dormitorios infantiles, por ejemplo, donde es más probable que se manchen y tengamos que lavarlas con regularidad.

También podemos decantarnos por un juego de sábanas de 80 que sea 100% algodón. Se trata de un material clásico para nuestra ropa de cama que resulta muy suave al tacto y a la vez es muy transpirable.

Si lo que buscamos es una calidad algo mayor, que confiera de más suavidad y durabilidad a las sábanas, entonces podemos buscar sábanas 100% algodón de 200 hilos. Estas tienen un gramaje superior a las 100% algodón, por lo que no resultarán tan asequibles pero probablemente podamos disfrutar más tiempo de ellas gracias a su alta calidad.

En el caso de buscar una opción de una gama más alta, entonces podemos recurrir a las sábanas de satén. Se trata de un material que imita la suavidad de la seda, pero tiene un precio más asequible. El satén se elabora a partir de otros materiales como el algodón, pero su fabricación se lleva a cabo a partir de hilos extremadamente finos que se entrecruzan a lo largo del tejido. De esta manera, lo que se obtiene es un tejido brillante y un tacto muy suave, que permite ser planchado con facilidad. Este material puede conferir de una gran suavidad a la hora de acostarnos, por lo que es ideal para aquellos que buscan la máxima suavidad posible en su cama.