Adapta tu descanso a tus necesidades
Las necesidades de descanso varían con el paso de los años y la edad. No necesita los mismos elementos de descanso un hombre joven de 35 años que un señor mayor de 85 años, así que es necesario adaptar su somier o su colchón a la evolución de la edad. En el caso de las personas mayores son muchas las necesidades de descanso que tienen respecto a la población más joven y por ello surgen elementos como los somieres articulados.
Si te encuentras en un momento en el que piensas que tu edad ya te está pasando factura al descanso y la calidad del sueño durante la noche, no pierdas más el tiempo y adapta tu descanso para lograr un sueño reparador y un mayor bienestar y confort a nivel muscular y articular.
¿Qué necesidades de descanso tienen las personas mayores?
Las necesidades de descanso de las personas mayores difieren de las del resto de la población en dos aspectos fundamentales. En primer lugar, el deterioro a nivel muscular, articular y óseo puede causar frecuentes molestias y dolores que afectan a la hora de conciliar el sueño y mantenerlo durante la noche. Elegir colchones y otros elementos de descanso específicos para ellos les ayuda a dormir y descansar de forma más confortable.
El segundo aspecto a tener en cuenta es que las personas mayores tienen mayores dificultades para dormir que la población joven. Esto es así porque con el paso de los años se disminuye la producción de sustancias químicas inductoras del sueño, lo que provoca despertares continuos durante las noches. Dormir en un colchón de calidad disminuye la frecuencia con la que esto ocurre gracias a la comodidad que aporta.
El somier articulado: beneficios para las personas mayores
El uso de un somier articulado facilita la vida a las personas mayores, especialmente a las que cuentan con problemas de movilidad reducida o necesitan de un aseo personal en su cama o de realizar las comidas en ella. Estos somieres articulados traen consigo ventajas tanto a nivel físico como mental, destacando por su importancia las siguientes.
Reduce el dolor de espalda
El uso de un somier articulado permite reducir los dolores de espalda en las personas mayores o enfermas, algo habitual cuando se pasan muchas horas en la cama. Además del dolor de espalda también ayuda a mejorar los dolores de hombros, cuello o pelvis. Algo que es posible gracias a la posibilidad de adoptar una postura correcta para el descanso.
Libera estrés
Estar en una cama muchas horas en una posición incómoda y que causa malestar y dolores genera una situación de estrés muy elevada que empeora el carácter de las personas mayores. Un somier articulado ayuda a liberar esos niveles de estrés gracias a las posiciones más cómodas que permite alcanzar.
Elegir posición preferida
El usuario del somier articulado tiene total libertad para ajustar el ángulo de inclinación del somier. De esta forma puede elegir en cada momento la postura que necesita para dormir, ver la televisión, para comer o en cualquier otra situación.
Favorece la circulación
Las personas mayores suelen tener problemas circulatorios, especialmente aquellas que apenas tienen actividad física, como son las personas usuarias de somieres articulados. Un somier articulado permite inclinar los pies, lo que ayuda a reducir la hinchazón en la zona inferior del cuerpo favoreciendo la circulación y evitando problemas como úlceras o rojeces.
Son muchos los beneficios de adaptar el descanso a tu situación personal y necesidades particulares, así que no te lo pienses más y usa elementos como los somieres articulados para disfrutar de un descanso confortable y reparador.