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Colchones: Todo lo que necesitas saber

La diferencia de peso a la hora de compartir cama puede presentar diferencias en los gustos y necesidades de cada uno. Las personas con un peso elevado suelen utilizar firmezas con niveles altos, en cambio las personas con peso bajo notan más comodidad en firmezas intermedias.

La solución para este tipo de parejas son los colchones gemelares que permiten disfrutar de distintas firmezas en un mismo colchón, gracias a la unión mediante cremallera de dos colchones diferentes. Este hecho permite obtener un descanso reparador, sin las molestias que pueda ocasionar el movimiento de cada uno de los colchones.

Normalmente, la gran diferencia de las personas que van a compartir colchón reside en la variación de peso entre una u otra. A esta diferencia se le suma también el tipo de cuerpo de cada uno, que causa diferentes tipos de presión.

Por estos motivos, es muy importante tener en cuenta en que zonas del cuerpo ejercemos más peso a la hora de acostarnos, ya que serán los puntos en los que el hundimiento será mayor. En función del peso notaremos que necesitamos mayor o menor nivel de firmeza, para elegir así el colchón que proporcione el mayor apoyo equilibrado y que reduzca las diferencias entre ambas personas.

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Los colchones de firmeza máxima están recomendados para personas que cuentan con una masa muscular elevada, que necesitan muy poco abrazo del cuerpo y un nivel de resistencia alto. Este tipo de firmeza permite la correcta alineación de la columna vertebral para personas con pesos elevados.

Normalmente las personas que se decantan por una firmeza máxima son aquellas que necesitan una resistencia superior, que sea capaz de sostener las curvas y los ángulos del cuerpo. Este tipo de personas suelen dormir boca abajo o boca arriba.

La firmeza del colchón no está siempre reñida con la adaptabilidad del colchón. La adaptabilidad del mismo recae sobre la parte superior del colchón, las capas superiores son las que dan la sensación inicial de acogida en el descanso, en cambio la firmeza viene determinada por el núcleo del colchón. Por ello la recomendación para la mayoría de gente que opta por un colchón de firmeza máxima es que le garantice el correcto apoyo del cuerpo, evitando los principales puntos de presión.